Durante años la tradición nos enseñó que debemos renunciar a nuestros propios sueños, para darle lugar a los sueños de Dios.
¿Y si Dios estuviese enamorado de nuestros sueños? ¿Y si acaso nuestros sueños fueron puestos por El?
Un mensaje que te hará volar en grande, y logrará que desentierres aquellos sueños que creías que no eran nobles.
Para volver a soñar como antes.
1 Comentarios
HOY LE DOY MUCHAS GRACIAS A DIOS PORQUE ME COSTARON MUCHOS AÑOS ENTENDER QUE DE DIOS DEPENDO Y QUE SI NO FUERA POR EL MIS SUEÑOS NO SE HUBIERAN REALIZADO BAJO SU PERFECTA VOLUNTAD
ResponderEliminar